Prestadores de servicios turísticos de Acapulco se manifestaron este martes en el jardín del puerto para exigir información clara sobre las obras de rehabilitación en la zona y sobre la puesta en marcha del proyecto Marinabús.
Durante la protesta, los inconformes suspendieron temporalmente los trabajos de remodelación y realizaron una jornada de limpieza en las playas El Morro e Icacos, como parte de su petición de atención responsable hacia la comunidad y el medio ambiente.
El presidente de Infraestructura del Consejo Consultivo de Turismo (ICCT), Jesús Zamora Cervantes, señaló que los prestadores han solicitado repetidamente información precisa sobre el impacto de las obras y el funcionamiento del Marinabús, pero las únicas respuestas han provenido de la empresa privada a cargo del proyecto, sin presentar documentos oficiales de autorización, permisos ambientales ni manifestaciones de impacto ambiental.
"Nos dieron espejitos diciendo que no había afectación, pero nunca mostraron un solo oficio que avalara lo que afirmaban. Ni PROFEPA, ni la Capitanía de Puerto, ni ninguna otra autoridad presentó pruebas", expresó Zamora Cervantes.
La reunión sostenida el jueves 18 de septiembre con representantes federales no concluyó con acuerdos ni fechas para una nueva mesa de diálogo. Solo el delegado de Gobernación Federal, Juan Carlos Barrios Curtid, se comprometió a gestionar un encuentro con sus superiores, aunque los prestadores expresaron dudas sobre la eficacia de esa gestión.
En cuanto a las obras de rehabilitación, los prestadores reconocieron su importancia, pero cuestionaron la demolición de banquetas recién construidas en la zona turística de la Condesa. Además, insistieron en que si los trabajos afectan la actividad náutica o los servicios turísticos, debe considerarse un proceso legal de indemnización, como ocurre en otros proyectos de infraestructura.
0 Comentarios