La Secretaría de Cultura del Estado de Guerrero ofreció una disculpa pública a las víctimas de la Guerra Sucia, a sus familias, a comunidades culturales, pueblos originarios y afrodescendientes, así como al pueblo guerrerense, por el acto cívico reciente realizado en torno a la figura del exgobernador Rubén Figueroa Figueroa, al reconocer que dicho evento constituyó un error que agravió la memoria histórica del estado.
En un pronunciamiento público, la titular de la dependencia, Aida Melina Martínez Rebolledo, afirmó que ningún marco legal puede estar por encima de la dignidad humana ni del dolor de las víctimas, y admitió que el acto representó una revictimización al exaltar a una figura vinculada con la represión, lo cual contradice los principios de verdad y justicia.
La funcionaria señaló que escucha y valida el reclamo social, y anunció una serie de compromisos orientados a la reparación del daño y a evitar la repetición de hechos similares.
Entre ellos, destacó la revisión y actualización del calendario cívico del estado, así como la elaboración del sustento técnico-jurídico para una iniciativa de reforma al artículo 30 de la Ley número 761 sobre Símbolos de Identidad y Pertenencia, con el fin de armonizar el marco normativo con los valores democráticos actuales.
Asimismo, aseguró que se priorizarán acciones para que los espacios públicos y los actos oficiales dignifiquen a las víctimas, preserven el legado de las luchas sociales y promuevan una educación basada en los Derechos Humanos.
De igual manera, reiteró el fortalecimiento de espacios de diálogo cultural que impulsen el arte, los talentos locales y la transformación cultural en Guerrero.
Martínez Rebolledo subrayó que la construcción de un futuro de paz requiere reconocer el pasado y sanar las heridas con verdad, y refrendó su compromiso con el diálogo, la equidad, la democracia y el bienestar común del pueblo guerrerense.
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