Por Trasfondo Informativo #JulioZenonFlores
Los Hombres Pájaro, volando atados a una cuerda desde 35 metros de altura, atrajeron tanto a turistas como a lugareños, al zócalo de la ciudad, en el segundo día de actividades del Festival De la Nao Acapulco 2022.
La presidenta municipal, Abelina Lopez Rodriguez, inauguró un día antes de este evento cultural en su edición XVI, que durante una semana reúne en diferentes locaciones las mejores expresiones artísticas locales, así como de China y Perú, países invitados y, en esta ocasión Veracruz, Estado invitado, en un importante gesto de cobijó al trabajo cultural en un contexto de evidentes carencias económicas, que obligan priorizar.
¿Qué va primero: lo urgente o lo importante?
Los hombres Pájaro, por ejemplo, conocidos también como Voladores de Papantla, que escalan descalzos un poste de 35 metros de altura para descender al aire libre, después de una ceremonia prehispánica de petición de lluvia, totalmente desprotegidos, ya que no se permite la instalación de una red o algo que pudiera amortiguar la caída, esta vez cayeron, dando las 13 vueltas de rigor, entre la semipenumbra, por la escasez de alumbrado público en la principal plaza del puerto, llena de turistas nacionales.
Los niños eran los más emocionados, sentados sobre unas losetas nuevas, aplaudiendo y señalando a los emplumados voladores que abtraidos tocaban en lo alto un tamborin y una flauta, hacia los cuatro puntos cardinales; las mujeres se cubrían la boca para ahogar el grito, todos formando un círculo que impedía ver la obra del fondo, donde se reconstruye el kiosco, robado hace 8 años a los acapulqueños.
Después de la emoción de ver el salto de los hombres pájaro, ir por una agua de limón con chia a La Michoacana es inevitable. luego un elote preparado con mayonesa o Chile y papas o bien un plátano macho al carbón con la lechera, si es que se alcanza, porque el producto vuela, como los artistas del espectáculo, ante la cantidad de clientes que se forman frente al anafre.
¡Solo hoy! Se apresuran a aclarar las marchantas.
-Es que es domingo - dice alguien.
Pero, este no es un domingo cualquiera. El zócalo está más lleno que de costumbre sin ser puente vacacional. Lleno también con un par violinistas mal colocadas junto a un tambo que vomita basura, un par actores vestidos a la usanza del siglo XVI, un malabarista, un cuarteto que inapropiadamente canta a la virgen María y alzan la voz para gritar ¡Que tiemble!.
El recorrido dura media hora, más los 20 minutos de los voladores de Papantla y los visitantes se toman fotos y entre quienes se retiran se alcanza a escuchar
Aquí no es como en la canción de Serrat, que dice "Gloria a Dios en las alturas recogieron la basura de mi calle ayer a oscuras y hoy sembrada de bombillas"
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