AMLO Y ACAPULCO…ECOS DE SU VISITA
Por Julio Zenón Flores Salgado
Hubo tres temas de Acapulco que llamaron la atención del
presidente Andrés Manuel López Obrador durante su visita al puerto este fin de
semana y en los tres ocupó un espacio destacado la presidenta municipal Adela
Román Ocampo, con quien tuvo varios gestos de cordialidad.
Uno de ellos fue el de la construcción del cuartel de la
Guardia Nacional, en la comunidad de El Salto, en donde el terreno fue aportado
por la administración de la ministra con licencia Román Ocampo y quien ha
estado al pendiente de esa obra, porque fue una parte importante de su visión
de la estrategia conjunta contra la inseguridad.
En ese tema las cifras que aportó el comandante de la Octava
Región de la Marina Armada de México, no fueron muy halagüeñas, pues quedó
claro que las cifras, sobre todo en el tema de los homicidios dolosos, se han
disparada, aunque en otros rubros se hayan disminuido.
Por eso el tema del cuartel que se construye a marchas
forzadas en El Salto, es tan importante, porque su operación podrá dar mayor
certidumbre a los miles de habitantes que habitan en la zona del Valle de La
Sabana, Renacimiento, Cayaco, Puerto Marqués y la zona Diamante, lo que
permitirá liberar otros recursos para el resto del municipio.
El presidente López Obrador lo anotó en su agenda de los
pendientes le puso fecha a su inauguración, aunque ya será en la nueva
administración de la ahora alcaldesa electa Abelina López Rodríguez.
Para el primer mandatario, sin embargo, no pasó
desapercibido que quien gestionó ese cuartel, dentro de la mesa de coordinación
para la paz, fue la actual alcaldesa Adela Román, por lo cual tuvo el noble gesto
de invitarla a que esté presente en su inauguración, aun cuando ya no esté en
la administración municipal. Durante la gira, el presidente dio instrucciones a
su equipo de logística para que la actual alcaldesa acuda como invitada a poner
en operación ese cuartel, que esperemos de resultados en ese tema en el que los
acapulqueños aún esperan que las autoridades le cumplan.
El segundo tema fue el relacionado al parque Papagayo, en
donde se invierten alrededor de 400 millones de pesos y que fue una obra de
remodelación integral solicitada por la alcaldesa Adela Román, en lo que es el
verdadero pulmón de la zona urbana de Acapulco, y cuyo deterioro era más que
evidente en los hundimientos de los andadores de adoquín, los árboles con
plagas y que se estaban secando, la invasión de la plaga de gatos que estaban
acabando con la fauna menor, entre ellos con las iguanas, la falta de una
planta tratadora de aguas residuales y la desaparición de diversos atractivos
que tuvo ese parque cuando fue creado con un maravilloso aviario entre las
copas de los árboles y un teleférico que se deslizaba desde el cerro del mogote
hasta la playa Papagayo.
La pandemia retrasó los trabajos y su inauguración ya está
acordada con el equipo del presidente Andrés Manuel, para el 3 de octubre, tres
días después de que Adela Román dejé de estar al frente de la administración
municipal, lo cual no fue obstáculo para que el presidente López Obrador le
pidiera que estuviera presente, si bien ya no como primera edil, si como
invitada especial, como un reconocimiento a su iniciativa y gestoría para
realizar esa obra.
Un tercer asunto que no quedó sin tratarse a nivel de
presidencia de la República, fue el relacionado con los recursos para el
saneamiento de la bahía de Acapulco, que implica una cifra de mil millones de
pesos entre la Sedatu y la Conagua, con aportaciones locales del gobierno
estatal y del municipal.
Esa acción es otra que ya no verá Adela Román como
alcaldesa, reconoció el presidente López Obrador, pero que fue gestionado por
ella y acordado con el gabinete presidencial el pasado 20 de agosto de 2020 y
que actualmente está aún en trámites en la Secretaría de Hacienda (SHCP) y que
se retrasó por el cambio de titular (por cierto un cambio muy positivo para
México, por el cartel que tiene el keinesiano Rogelio Ramírez de la O), pero
que sin duda llegarán y se ejercerán ya con la maestra (en derecho) Abelina
López, despachando en el palacio municipal, además de que ésta última ya fue a
reconfirmarlos con Sedatu y Conagua, a la Ciudad de México.
Los tres temas, el cuartel de la Guardia Nacional, el parque
Papagayo y el saneamiento de la bahía, con tres aspectos torales para Acapulco,
que no serán inaugurados por la actual administración municipal, pero que son
parte de la infraestructura soporte que deja Adela Román para que la siguiente
alcaldesa, Abelina López, aterrice mejores condiciones de vida para los
acapulqueños y éstos puedan percibir en la práctica que la cuarta
transformación es más que un discurso y que puede tener repercusiones positivas
en lo local de cada comunidad.
Los otros dos temas de gran importancia que atendió el presidente
en Acapulco fueron la visita al llamado Edificio Inteligente, con la idea de
retomar el traslado ahí de la Secretaría de Salud federal, y el libramiento
Poniente, que unirá a La Venta con el poblado de Bajos del Ejido, rumbo a
Zihuatanejo, acortando el camino hacia ese balneario de la Costa Grande.
Los tres temas, sin embargo, muestran que el presidente
López Obrador sí tiene claro el trabajo de la actual primer edil de Acapulco, a
diferencia de los cuadros de Morena de Guerrero, que la marginaron de casi
todos los cargos de representación popular y la vieron como enemiga, en vez de
aprovecharla como activo de ese partido en construcción.
Por ahí puede asomar el hecho de que Adela Román siga siendo
parte importante de Morena y que prosiga su carrera política, más allá de su
paso por la alcaldía y para eso, como ya se ha visto en la práctica, la
recomendación de AMLO es carta suficiente…
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