*”Se van a liberar”, dice de los accesos cerrados en la zona Diamante
Por Julio Zenón Flores Salgado
Algunas playas se habían convertido en cantinas, se habían
construido baños, que no estaban conectados al drenaje, y en algunos de esos
negocios se podía consumir desde cerveza, hasta otro tipo de productos, explicó
la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, durante un recorrido para
supervisar accesos en las playas de la zona Diamante, en donde han desaparecido
decenas de estos andadores.
Enumeró algunas de las playas más conocidas, como caleta y
caletilla, papagayo, playa Suave, entre otras, donde se han retirado construcciones
que ocupaban el espacio de manera ilegal y que ahora están libres, convertidas
en una ventana ecológica. “De lo que se trata es de que la gente que pueda
pagar por un toldo o unas sillas lo haga, pero que también quien no tenga para
pagar pueda llegar y poner sus propias sombrillas mientras disfruta de la playa”,
explicó.
Acompañada del director de CAPTA, Jondalar Castillo, la primera
edil llegó al acceso de la playa Revolcadero, donde se aprecian unos 30 locales
contruídos en ambas aceras y en lo que alguna vez fueron áreas verdes, en el
camellón del bulevar de acceso; ahí supervisó uno de los puestos de control de
contagios COVID-19 y pidió a los encargados limpiar una zona anegada, que lucía
un tanto lodosa frente a la mesa donde tenían el gel antibacterial y los
cubrebocas.
Luego de dialogar con algunos de los prestadores de servicios turísticos, explicó que la intención d recorrer los módulos y accesos de playa era el de mandar el mensaje de que en Acapulco “hay reglas y se respetan”, en evidente referencia al video que se viralizó recientemente con el título de MomImInAcapulco, donde se llama a acudir al puerto, donde “la regla es que no hay reglas!, decía el promocional subido fugazmente a las redes sociales por el Fideicomiso de promoción turística (FIDETUR).
Asimismo, aprovechó para señalar que al acudir a la entrega
del nombramiento del nuevo titular de FIDETUR, Eligio Serna Nájera, comentó en
ese contexto, lo incorrecto de que opere un organismo de ese tipo sin que se
incluya a algún representante del ayuntamiento porteño.
En otra parte del recorrido, la alcaldesa constató que
decenas de accesos a las playas dejaron de existir al desaparecer con las construcciones
que se han realizado en la zona, y que se han ido apropiando del área pública
que servía de acceso al mar y que aparecen en los planos originales del Acapulco
Diamante, incluso se detuvo ante una alta pared levantada para impedir el paso
por uno de esos accesos, que existía al lado de lo que fue la casa del popular
cantante Luis Miguel.
Ahí, el reportero le preguntó directamente si se intentaría
recuperar el acceso, a lo que Román Ocampo respondió:
-Se van a recuperar
Y en ese momento solicitó al secretario general del
Ayuntamiento, Ernesto Manzano, que revisar el tema del amparo que obtuvieron
los empresarios de la constructora que taparon ese paso.
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