Por Alfredo Guzmán
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Recientemente leí que el gobierno del estado de Guerrero habría recuperado ocho concesiones, 6 de radio y dos de televisión que por alguna circunstancia administrativa y financiera, desde el año 2020 habrían dejado de funcionar y conformaban el Organismo Público Descentralizado, Radio y Televisión de Guerrero (RTG).
El anuncio establece sin duda una buena noticia para quienes lo promovieron y lograron, luego de que las concesiones en radio y televisión, no son fáciles de conceder, ni autorizar, derivado de que se requiere establecer que se cuenta, con equipo, personal e instalaciones para operarlo con eficiencia.
La información es poder, dice la frase y tiene muchos efectos. Gobierno que depende de particulares para dar a conocer sus datos, informes y acciones, tiene cierta debilidad.
Lo anterior, también significa una inversión financiera, pero que en cuestiones de manejo informativo y con una buena estrategia, el costo es poco, por el valor que se genera, en cuanto a información oficial.
Algunos dirán y para qué quiere un gobierno tener concesiones en radio y televisión. Otros dirán que al contrario, es positivo tener sus propios canales informativos, para generar sus propias estrategias informativas.
La disputa por el espectro radial y televisivo, es históricamente un manejo político y de control.
Las concesiones recuperadas por el gobierno de Evelyn Salgado Pineda, incluyen 2 frecuencias de FM en Acapulco y Zihuatanejo, así como 4 frecuencias de AM en Chilpancingo, Taxco, Ometepec y 2 canales de televisión en Acapulco y Chilpancingo.
Durante un año y medio el titular de Radio y Televisión de Guerrero (RTG) Elías Noriega García se abocó a gestionar la recuperación de las concesiones mencionadas ante el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la concesión se logró por 15 años.
Se entiende que con estas concesiones recuperadas, el gobierno de Guerrero, podrá definir políticas públicas de información, que le permitan que su voz, programas sociales, acciones de gobierno y promociones, sean mejor manejadas y con eficiencia.
También recuperar los servicios de comunicación y entretenimiento a los y las guerrerenses, fortaleciendo así el acceso a la información, diversidad de contenidos y la promoción de la cultura de las regiones del estado de Guerrero.
La apuesta es grande, ya que es un gran aparato informativo que dejó de funcionar año y medio y que ahora, deberá retornar y recuperar las audiencias, los espacios que dejó de usar y hacer de la información un servicio eficiente para el gobierno de Guerrero, sus políticas públicas y los servicios que presta a la sociedad.
Enhorabuena.
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