* Amor con amor se paga ¿no?
Por Julio Zenón Flores Salgado
Cuando el presidente mexicano apostó por la hija del senador
con licencia Félix Salgado Macedonio, como candidata a gobernadora de Guerrero,
no faltó quien creyera que se estaba equivocando en aras de no dejar perder por
completo a su amigo el Toro sin cerca, luego de que el TRIFE y el INE le quitaran
la candidatura al hombre que sin duda era en ese entonces y es ahora el más
popular de Morena en la entidad.
Pensaron que su juventud, que su falta de experiencia
política, que el hecho de no ser mu conocida, que los negativos de su padre, en
fin, había argumentos para esperar que en pocos meses estuviera tirando la
toalla y dejando en su lugar a Félix.
El resultado de la consulta para la revocación de mandato de
este domingo obtenido en Guerrero, demostró que el presidente no se equivocó,
que al respaldar la candidatura de Evelyn, en vez de perder el empuje que traía
Félix, multiplicó por dos esa figura, misma que en los meses previos a la
consulta mencionada se convirtió en una pinza: una parte -Evelyn- desde el
trabajo institucional, sin incurrir en ninguna patraña para impulsar ese
proceso, sin recurrir a acciones ilegales por las cuales el INE le llamara la
atención y metida en su trabajo de gobernar esta entidad bronca, alentó en la
gente la simpatía hacia la 4T, mientras la otra parte -Félix- se despojó de su vínculo
con el Senado y recorrió los municipios sacudiendo conciencias, mientas una
buena parte de la estructura de Morena y la mayoría de representantes populares
que ganaron por ese partido permanecían en la comodidad del asiento, esperando
que la participación en el proceso cayera del cielo.
En el trabajo de impulsar la participación social en la
revocación de mandato había que meterse, pues las condiciones no serían
fáciles, tanto porque las urnas esta vez estarían más lejos de lo habitual,
como porque la propaganda oficial del INE fue raquítica, y ese trabajo recayó
casi todo en Félix Salgado recorriendo comunidades sin más recurso que su voz y
talento para cantar -aunque un poco desafinado- y en el trabajo duro de la
gobernanza, de no decepcionar a los guerrerenses, para que no se cayera la
confianza en el jefe máximo de la 4T, a cargo de la gobernadora Evelyn Salgado,
sin salirse de la legalidad y bajo una estricta vigilancia de quienes esperaban
un paso en falso para acusarla ante el TEPJF.
En esas circunstancias, el estado de Guerrero ratificó el
apoyo al presidente López Obrador, con una de las participaciones más altas, al
registrar el 24.41 por ciento de electores, equivalente a 622 mil 872 personas
que acudieron a las urnas, de las cuales el 95.52 por ciento se pronunció a favor
de que el tabasqueño SIGA al frente de la República. Esas son las cifras con
las que llegó la joven gobernadora a la reunión con el presidente, de las más
altas en participación y en porcentaje a favor de que se quede ¿qué más le
puede pedir el Presidente?
Por eso tuvo razón Evelyn al detenerse en el poblado de Tres
Marías, donde casi todos paran por sus exquisitas quesadillas y, con el
pretexto de mostrarnos la sabrosa fritanga aprovechar para decirle al pueblo a través
de sus redes sociales que se sentía “muy satisfecha por la jornada del día de
ayer” y mostrarnos que está consciente de la importancia del proceso: “ha sido
un ejercicio inédito, una jornada histórica, que sin duda va a marcar la vida
democrática del País y de Guerrero”, explicó.
De igual manera, una de las gobernadoras del país que mejor
viste, dejó ver que no es decorativa, que tiene perfectamente claros los puntos
cardinales de la política actual: “esto hay que tomarlo como lo que es, un gran
ejercicio donde se consulta al pueblo sobre el trabajo que está realizando el gobernante.
Esto debe ser una constante, hay que preguntarle al pueblo como están, cómo
vamos caminando, cómo estamos trabajando”
¿Qué más se le puede pedir?
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