NO DESAPAREZCAN EL TURISMO EN GUERRERO
Por Manuel Añorve Baños
Hace unos días, Caminos y Puentes Federales emitió un comunicado por medio del cual señala un aumento a las tarifas de peaje en la Autopista del Sol , que conecta a la Ciudad de México con el estado de Guerrero y es uno de los principales medios de flujo turístico del país.
Este hecho, se traduce en un duro golpe para la economía guerrerense, que bajo el escudo de la inflación repercutirá en mayor medida a una de las actividades más relevantes para la entidad sureña.
Incluso, las repercusiones de aumentar el costo del peaje no sólo representan una merma para las personas que quieren visitar las regiones turísticas de la entidad, sino también para la economía local, con las y los miles de guerrerenses que utilizan este medio para su transporte cotidiano.
Seguramente, los aumentos al peaje a esta autopista se han manifestado como una deplorable constante en lo que va del sexenio del Presidente López Obrador, con más de cinco aumentos en tan solo tres años. Dejando al descubierto una falta de sensibilidad extremadamente preocupante, que se ratifica con la poca importancia que se le ha dado a la actividad turística aún desde los pasillos de Palacio Nacional, pues la industria denominada sin chimeneas ni siquiera ha figurado en los informes de gobierno del titular del Ejecutivo Federal.
En sentido opuesto, no hay que perder de vista que cuando los fenómenos meteorológicos se producen en Guerrero en el sexenio del anterior Presidente de la República, hubo bajas en las tarifas de peaje del 50% en la Autopista del Sol, con el fin de impulso la recuperación económica del estado.
Sin embargo, desde el inicio de la contingencia sanitaria por Covid-19 hemos pedido increíblemente que baje el costo de peaje de la Autopista del Sol, sucediendo justamente lo contrario, ya que se han presentado reiterados incrementos que no solo impactaron al turismo de la entidad , sino a los bolsillos de muchas familias guerrerenses en su conjunto que dependen de esta actividad económica la cual es la principal fuerza de ingresos de la entidad.
Aumentos en costos de servicios como este, acompañados de como los de los servicios de electricidad, el costo de la canasta básica y el de las gasolinas hace que sea mucho más complicado la recuperación para las y los mexicanos.
Estamos ante un gobierno federal que ha caído en el ensordecimiento de las causas de la población, prefiriendo mantener programas asistencialistas que pocos resultados han dado o centralizando grandes recursos a proyectos con intereses personales y electorales como el Tren Maya y la Refinería de Dos Bocas.
Urge que el gobierno mexicano entre en razón y deje de ocasionar daños colaterales con sus decisiones a los bolsillos de millas de mexicanos. Por estas razones, solicitó la comparecencia del titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, así como de Caminos y Puentes Federales para que expliquen ante el Senado de la República la serie de incongruencias que se han manifestado.
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