Por Julio Zenón Flores
El presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO)
de la LXIII legislatura de Guerrero, Alfredo Sánchez Esquivel, condenó el
ataque de policías comunitarios contra una asamblea en la cabecera municipal de
Xalpatláhuac, en la montaña alta de la entidad, donde los armados también
atacaron e hirieron a policías municipales y tomaron el palacio municipal.
Sánchez Esquivel consideró que ese tipo de agrupaciones
armadas deben de regularse pues su ataque en la montaña pudo haber terminado en
una tragedia, aunque señaló que para resolver el asunto se debe dar prioridad
al diálogo, luego de que tanto la alcaldesa de esa comunidad como otros representantes
sociales están ya en conversaciones con el secretario de Gobierno, el senador morenista
y simpatizante de la lucha armada, Saúl López Sollano.
En entrevista concedida en el palacio legislativo, el
presidente de la Jucopo señaló que no se puede disolver una asamblea a tiros, -ni
Don Porfirio Díaz, lo hizo- “creíamos que lo habíamos visto todo”, dijo y
expresó que nunca las policías comunitarias se deberían de volver contra el
pueblo; su actuación “está totalmente fuera de la ley”, aseveró.
Descartó -no obstante- que sea necesaria la presencia de la
Guardia Nacional y de la policía estatal en ese lugar. “Hay que buscar el
diálogo”, dijo y agregó que una vez agotado entonces las instancias y las organizaciones
llegarán a un acuerdo para garantizar la seguridad de la zona.
Por otra parte reconoció que existe rezago legislativo, pero
se mostró alentado al observar que el hecho de que ya se le haya tomado protesta
a los presidentes de las comisiones significa que ya se pueden empezar a
abordar los temas pendientes. El retardo es producto de la búsqueda de
equilibrios y consenso, acotó.
De igual manera insistió en el llamado a quienes ejercen recursos
públicos a aplicar una mayor disciplina financiera, pues de otro modo ningún presupuesto
alcanzará para atender las necesidades y recordó que en alguna ocasiones
Guerrero tuvo hasta 60 mil millones de pesos, para atender los daños de un
huracán, pero “aún así fue insuficiente; más que un tema de dinero es de mayor
transparencia, mayor disciplina financiera, por parte de los directores de
egresos, buscando entre todos hacer más con menos en vez de pagar aviadores o trabajadores
que no generen ningún beneficio”, asentó.
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