Torruco, ¿qué celebrará en Acapulco?

Textos y claves…

Miguel Ángel Arrieta

Chicago, Illinois.- Las contradicciones entre la realidad encontrada en las ciudades americanas proveedoras de turismo hacia México, y el discurso del Secretario de Turismo del gobierno mexicano, Miguel Torruco Márques, obligan a preguntar qué festejará el funcionario federal este viernes 27 en Acapulco en el marco del Día Internacional del Turismo.
Además de ser paradójico que haya seleccionado para conmemorar esta fecha un polo turístico al que no le ha dedicado la menor inversión, el titular de Sectur México llega a esta cita sin una estrategia indicadora de las acciones para revertir la cancelación de la promoción de destinos turísticos mexicanos en USA.
A diez meses de haber llegado Torruco Márques a la Secretaría de Turismo, las empresas mayoristas en el ramo de viajes en la costa Este y la región del Medio Oeste americano, aún esperan respuesta sobre el porqué quedaron interrumpidas de golpe las relaciones públicas y los acercamientos mediáticos para ofrecer atractivos de playas, pueblos mágicos y rutas prehispánicas entre demandantes de estos productos.
Aunque no ha habido un pronunciamiento oficial, a los inversionistas del ramo hotelero e integrantes de la extensa estructura económica dedicada a la prestación de opciones turísticas en todo México, les queda bien claro que la declaración manifestada por Miguel Torruco hace cinco meses en el sentido de que este el sexenio del sureste, es irreversible y su maduración desestabiliza los equilibrios capitales del tercer sector más productivo en el país.
Lejos de generar confianza, el acuerdo entre la Sectur y la Secretaría de Relaciones Exteriores, para que esa última se haga cargo de la gestión y desarrollo de la promoción turística en el extranjero, disminuye la confianza del empresariado turístico desde el momento en que se anunció que para realizar este trabajo primero se capacitará a integrantes del cuerpo diplomático.
Particularmente porqué los consulados en la Unión americana fueron objeto de ajustes presupuestales para reducir su financiamiento al máximo, y sobre todo ante la exigencia de perfiles profesionales especializados en mercadotecnia que permitan competir con destinos del Caribe, Centro, Sudamérica y el Pacífico, de los cuales, obviamente, carece el servicio consular.
De hecho, la creación del Consejo de Diplomacia Turística de México, (CDT), es todo un misterio ya que todavía no se explica como van a realizar esa tarea los representantes en 80 embajadas y 67 consulados en el mundo. Ni de donde saldrán los recursos económicos destinados a ese fin, salvo el anuncio realizado por titular de la SER, Marcelo Ebrard, para anticipar que ese dinero saldrá de los ahorros del gobierno federal.
Por lo pronto, hoy, en el día Internacional del Turismo, Torruco Márques no puede pasar por alto que la proyección turística internacional de México se estructura en tres columnas que le son totalmente desconocidas al cuerpo diplomático:
1.- Recuperar la presencia de México en el contexto global del ramo, haciendo mayor presencia integral en ferias y exposiciones internacionales; un campo en el que cada día la competencia es más férrea y cuyos competidores no sustentan sus ofertas en simples expectativas.
2.- Operar situaciones de crisis mediáticas derivadas de hechos adversos, de la convulsa y amenazante violencia y por las campañas negativas iniciadas con noticias falsas difundidas en redes sociales, lo que exige una dedicación de tiempo completo a la que no está habituada el grupo consular, al ser un cuerpo netamente burocrático, cuadrado por definición.
3.- Replantear el trabajo de inteligencia promocional que refleje un México evolucionado, con la oferta turística más diversa y con servicios que cubran lo que demanda el turista norteamericano, europeo y ahora el asiático.
Sin una estrategia que vaya más allá de cimentar la canalización de recursos hacia el Sureste mexicano, Torruco estará este viernes en Acapulco, -joya emblemática del turismo internacional-, haciendo lo que mejor hace: presumiendo el trabajo que realmente han hecho y proyectan realizar los gobernadores de estados con elevado potencial turístico.
En septiembre del 20015, como gobernador electo, Héctor Astudillo Flores escuchó en esta ciudad a representantes de importantes agencias de viajes, quienes le comentaron que estaban muy interesados en promover los productos Ixtapa-Zihuatanejo, Acapulco, pero que lo habían dejado de ofrecer porqué ningún personaje de Guerrero les hacía llegar la información correspondiente.
A partir de ahí y ya como gobernador en funciones, Astudillo por medio de su secretario de Turismo comenzó a tejer la recuperación de ese mercado que en el pasado redituó una de las principales fuentes abastecedoras de turistas hacia Acapulco. Este año se complementó el proyecto y en diciembre próximo comenzará a operar la ruta aérea Chicago-Acapulco, pero los asesores de Miguel Torruco ya le sugirieron al funcionario federal incluya este logro dentro del paquete d lo realizado hasta ahora en su paso por Sectur,
En el fondo, la clave de la nueva política turística federal se localiza en el reciclaje de intereses para depurar a los beneficiarios del sistémico binomio PRI-PAN, y sustituirlos con nuevos socios, aunque al final de cuentas el control del mercado se mantenga concesionado a los mismos personajes del pasado: Los Alemán, Azcarraga y Vázquez Raña.
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