Dámaso Pérez Organes debe renunciar

Porque ha demostrado incapacidad para resolver los problemas de Atoyac, porque cree que regalando dinero se resuelven las necesidades de la gente, porque su administración trabaja sin rumbo y ha dejado que personas sin escrúpulos manejen a su albedrío el dinero de los atoyaquenses.
El pasado viernes 6 de octubre de 2017 se le notificó a un grupo de trabajadores que estaban despedidos de sus empleos, porque el Ayuntamiento no tenía recursos para pagar sus salarios.
Esto representa un acto de injusticia porque corrieron trabajadores que ganan menos de 2 mil 500 pesos a la quincena, algunas son jefas de familia que mantienen a sus hijos y los tienen estudiando. ¿Cuándo pueden ahorrarse corriendo trabajadores que ganan salarios simbólicos?
¿Por qué no mejor los ediles renunciar a sus salarios onerosos y a su gasto social que hace que cada uno reciba 70 mil pesos mensuales?
Si los ediles renunciaran a su gasto social se ahorrarían mensualmente 400 mil pesos que podrían servir para cubrir el salario de los que ganan menos.
Está claro que en el caso de cuando menos 38 trabajadores su despido se debe a una revancha política por parte de los regidores del PRI y es además una represalia por haber participado, durante el mes de agosto, en un plantón para exigir el pago puntual de sus salarios.
Para éste despido el cabildo elaboró una lista de 240 prospectos, que después de una revisión quedaron 178, pero luego manos ajenas al cabildo, entre las que están las de la tesorera Mayli Enid Ponce Manríquez y la ex oficial mayor Ana Betzy Castro Arzeta manipularon la lista, sacaron y metieron a su antojo afectando principalmente a los 53 trabajadores que participaron el paro de agosto y que exigieron sus renuncias.
Por eso Dámaso Pérez Organes debe renunciar a la presidencia porque ha permitido que personas ajenas, y sin ninguna sensibilidad política, pero sobre todo sin amor al pueblo de Atoyac manejen a su antojo los recursos humanos y financieros del municipio. Porque a decir verdad quien verdaderamente gobierna este municipio de llama Mayli Enid Ponce Manríquez y sus socio mayoritario Florentino Paz Serrano, El Pocho.
Por eso invitamos a la ciudadanía a sumarse a la exigencia de los trabajadores despedidos:
El pago total de la liquidación a la que tienen derecho por los años que laboraron en el Ayuntamiento de Atoyac.
El cumplimiento cabal a la minuta que se firmó entre el Cabildo y los trabajadores donde los ediles se comprometieron a cambiar a la oficial mayor, a la tesorera, al jefe de nómina y al subdirector de obras públicas. Porque hasta ahora los cambios han sido simulados y sabemos que la tesorera tiene la lista de los 154 despedidos y aunque no se les haya notificado oficialmente amenaza con no pagarles.
Que como parte del plan de austeridad los regidores renuncien a los recursos que reciben para gasto social, que entre todos, haciende a los 400 mil pesos.
Que se audite el dinero que se invertido en la rehabilitación de los caminos rurales.
Que se haga pública la lista de raya mediante la cual cobran los aviadores que tiene el Ayuntamiento.
Y que se transparente el proceso que se siguió para despedir a los trabajadores, que se sepa cuáles fueron los criterios que se emplearon para hacer la selección de los que se iban y se quedaban. Porque no se vale que haya familiares de los ediles en la nómina y que la ex oficial mayor junto con su esposo se les haya cambiado solamente de área con su salario preferente.
Que renuncie el presidente municipal de Atoyac Dámaso Pérez Organes porque ha demostrado no tener capacidad para resolver los problemas del municipio. Porque ha permitido la tiranía del Cabildo, el nepotismo de los directivos y el desorden administrativo que vive el Ayuntamiento.

Enviado en pruvadir