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La pelea por la alcaldía de Acapulco está entre...

La sorpresiva movilización multitudinaria a favor de la diputada Julieta Fernández Márquez, dio en la nariz a quienes la creían fuera de toda posibilidad, al ligar su suerte a la de su esposo, Manuel Añorve Baños, quien hace poco dejó de ser parte de la dirigencia nacional del PRI junto con su líder y guía moral Manlio Fabio Beltrones.
Con motivo de su informe de labores la legisladora dio muestras de que está viva y actuante y que es una clara aspirante a gobernar Acapulco, en el 2018.
La diputada, sin embargo, tendrá que librar una dura batalla antes de siquiera ser candidata, pues en su partido el líder de Acapulco Fermín Alvarado Arroyo, ya se ha dicho listo para esa batalla, al igual que el diputado federal Javier Taja Ramírez, quien ganó con abrumadora mayoría el distrito 04 federal, en la pasada elección y que por ese solo hecho ya se le podía considerar entre los favoritos.
El PRI, además, tendrá que decidir si lanza una figura popular, ligada a buena parte de la izquierda, el regidor Rodolfo Escobar Avila, líder sindical muy querido entre los obreros porteños.
Y si acaso le fuera bien en el tricolor, la legisladora tendría que obtener una alianza con el empresario Jacko Badillo, que anda tan crecido que ni su pesca de tiburones lo calma.
Después de ganar la contienda interna, Julieta Fernández tendría que enfrentar una posible alianza de parte del PRD con el PAN, que podría llevar al síndico Ilich Lozano Herrera, como abanderado, o una alianza de parte del PRD con Morena que podría llevar a un ex alcalde perredista como candidato.
Esto sin considerar que el propio alcalde actual, Evodio Velázquez Aguirre, podría buscar la reelección, si logra, en el 2017, comunicar mejor sus resultados a la ciudadanía y si logra cuajar una alianza con sus principales tribus que lo respaldan, aunque a medias, en su administración, lo cual desde ahora se ve difícil ya que ninguno de ellos ve con buenos ojos una alianza PRD-PAN y esa sería la única que garantizaría a la izquierda mantener la alcaldía.
No hay que olvidar que MC quiso apostarle al suicidio político al buscar una alianza con Angel Aguirre Herrera, y que tendrá que ir, a fuerza con candidato propio, a la contienda,m para lo cual tiene en primer lugar a Mario Ramos del Carmen, Contralor del gobierno priista, pero con menos cola que el diputado Ricardo Mejía Berdeja.
En este escenario no se puede descartar el lanzamiento de algún candidato independiente, que termine por recoger el descontento popular y al menos haga perder a los favoritos.






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