Baldemar Gómez Roque
Chilpancingo Gro, a 27 de septiembre del 2016.-Antonia Morales Vélez, dirigente de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), reconoció que ella está dentro de los 20 profesores en la entidad que son dos de la región Centro y uno Norte, además de 17 más, no así el secretario general Ramos Reyes Guerrero, quien, asegura, negoció en privado con las autoridades federales.
Antonia Morales Vélez, dirigente de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), reconoció que ella está dentro de los 20 profesores en la entidad que son dos de la región Centro y uno Norte, además de 17 más, pero extrañamente no está en la lista el secretario general Ramos Reyes Guerrero, quien, asegura, “negoció en privado con las autoridades federales”.
Agrego, que en la lista está conformada por dirigentes de las siete regiones de la entidad, donde existe hay algunos líderes como el profesor Manuel Rosas Zúñiga, activo integrante de la comisión política y el secretario general de la CETEG, Ramos Reyes Guerrero, artífice de muchas, bloqueos y acciones de vandalismo, quienes, de manera inexplicable no están cesados y continúan cobrando de manera normal”, advirtió.
Sostuvo que con esta situación está claro que las autoridades estatales y federales están haciendo su trabajo, mientras que el magisterio disidente de la entidad como representante de la base trabajadora seguimos haciendo lo nuestro que es continuar con las movilizaciones en contra de la Reforma Educativa y el examen de evaluación.
Confirmó que en su campamento ubicado en el zócalo capitalino son tres maestros que ya no cobran desde hace más de cinco quincenas, por lo que estamos seguros de que ya nos dieron de baja, “primeramente yo, luego la maestra Margarita Nava, encargada de prensa y un compañero Víctor Hidalgo de la región Norte que también está con nosotros en el plantón, además de los otros 17, de las distintas regiones de la entidad.
Aclaró que tienen retenidos sus pagos desde hace ya tiempo, pero oficialmente no han recibido ningún documento que les indique que ya están despedidos, así como tampoco de voz han sido informados de esta situación, reiteró.
“A pesar de esta triste situación, nosotros como profesores hemos seguido realizando nuestras labores, y en cuanto a la justificación de los cuatro días que no se asistieron a clases, la Secretaría de Educación Pública (SEP dio un plazo de diez días para comprobar el por qué se faltó a las aulas de clase, por lo que aún tenemos la esperanza de presentar los justificantes que piden y tratar de salir de esta pesadilla que es la de estar sin cobrar”.
Recalcó que son momentos de reorganizarse como magisterio disidente para retomar la lucha contra la aplicación de las reformas estructurales, además de que ya se planea llevar a cabo un plan para cerrar definitivamente las escuelas en Guerrero, pero ahora va a ser con el consentimiento de los padres de familia, finalizó.
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