La legisladora consideró que la realización de cirugías reconstructivas de mama, como consecuencia del cáncer mamario, debiera estar incluida entre los servicios que otorga el Seguro Popular, ya que se trata de un problema de salud y no estético, como lo cataloga el gobierno federal.
Cuando una mujer, después de padecer cáncer se ve obligada a quitarse el seno, se siente mutilada, no se reconoce a sí misma, tiene que seguir con tratamientos de quimioterapia que provoca la pérdida del pelo, pierden el empleo, pues ya no pueden acudir, y en ocasiones pierden hasta al marido, por las dificultades de reanudar las relaciones normales de pareja. "Es traumático", apuntó.
Sin embargo, reconoció que falta voluntad en las autoridades de salud para incluir la cirugía en el servicio normal, ya que recursos para esa actividad si existen.
Al respecto el director de Rebicam, el doctor Javier Solorio, apuntó que ellos son una organización sin fines de lucro que en Guerrero ha operado a una cien mujeres, de manera gratuita, por medio de brigadas de especialistas que vienen en campañas y que las cirugias se realizan en los quirófanos del IMSS y del ISSSTE, con los cuales se tiene convenio para hacer uso de esas instalaciones.
Lamentó por otra parte que el ayuntamiento de Acapulco se niegue a prestar el quirófano de la Unidad Médica Quirúrgica, de la Dirección Municipal de Salud, con el argumento de que no está en condiciones para realizar esas cirugías, cuando en años anteriores, desde el 2010 al 2012 se realizaron unas 60 cirugías de ese tipo en ese lugar.
Destacó la importancia de la donación del medicamento, que es un antibiótico de segunda generación, de las familia de las Cefalosporinas, ya que aunque la cirugía es gratuita, el tratamiento con el profiláctico tenía que ser comprado por las propias mujeres intervenidas, y de esa manera se les proporcionará gratuitamente.
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